Apple quiere hacer MacBooks negros con Vantablack

Antes de comenzar a fabricar todas sus computadoras portátiles con aluminio, Apple ofreció MacBooks con un acabado negro mate que, hasta ahora, ha sido un desafío para reproducir en todas sus computadoras de metal.

Sin embargo, una nueva patente sugiere que Apple ha ideado una forma de dar a sus últimas MacBooks un acabado negro mate utilizando una técnica inteligente que atrapa y evita que la luz rebote en su superficie.

Si has comprado una MacBook recientemente, sabes que lo más cercano a negro que puedes conseguir es la opción Gris espacial de Apple, que es oscura, pero lejos de ser negra.

El problema es que para aplicar un acabado de color a un dispositivo hecho de aluminio, su superficie necesita someterse a un proceso de anodización para proporcionar una superficie más adhesiva para que los pigmentos se adhieran.

Sin embargo, hay una forma de crear un acabado negro mate impecable en casi cualquier objeto, como lo descubrió una empresa británica llamada Surrey NanoSystems. Su pintura Vantablack está hecha de nanotubos de carbono microscópicos que pueden atrapar y absorber más del 99,97% de la luz visible que lo golpea, lo que hace que el acabado parezca tan oscuro que es completamente invisible para el ojo humano.

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El “Vantablack” de Apple

El problema para Apple es que en 2016 el artista Anish Kapoor se aseguró los derechos exclusivos para usar Vantablack, lo que significa que la compañía no puede usarlo en sus MacBooks. Pero, lo que Anish Kapoor no posee en exclusiva es la ciencia de cómo funciona Vantablack, y eso es lo que los investigadores de Apple están trabajando para recrear utilizando otros métodos.

Como señala Apple en la patente no. 20200383224, Apple busca, través de un proceso que implica anodizar la superficie de un sustrato metálico, infundir partículas de color en los poros microscópicos de la capa de óxido metálico resultante y luego aplicar una capa final de características que absorben la luz, la reflectividad de la superficie metálica debe reducirse drásticamente.

Un ejemplo de ese paso final descrito en la patente implica grabar una serie de picos y hoyos irregulares, que varían en altura en solo dos micrómetros, que hacen que la luz quede atrapada y rebote en direcciones aleatorias para crear un reflejo más difuso que tiene una apariencia mate más apagada para el ojo humano.

Este sería más un enfoque intermedio que toma prestadas algunas de las técnicas de Vantablack para que los futuros iPhones y MacBooks retengan la resistencia y durabilidad de sus marcos de aluminio, pero podrían ofrecer opciones de colores brillantes como los iMacs de Apple de antaño.