La tecnología no deja de avanzar y desde que se combinó con la Ciencia millones de personas han sido beneficiadas. Para nadie es nuevo que desde su descubrimiento la tecnología 3D es un recurso determinante a la hora de mejorar vidas. Así que recordando esto, tenemos un nuevo avance que celebrar y es que expertos estadounidenses lograron imprimir un minicorazón humano.
Las palmas se las lleva la empresa BioLife 4D con sede en Chicago. El minicorazón del que hablamos es exactamente igual que uno real solo que a escala. Por obvias razones el material no es apto para uso humano, sin embargo, significa un avance realmente importante. Este es tan solo el primer paso que se necesita para crear un corazón artificial que sea viable para los trasplantes.
Este minicorazón se imprimió con células moleculares cardíacas derivadas de un paciente y se hizo un bioenlace a partir de compuestos de matriz extracelular. Estos últimos replican las propiedades del corazón en los mamíferos.
Esfuerzo constante
Este no es el primer acercamiento que la empresa BioLife 4D tiene con impresiones en 3D. De hecho, antes del minicorazón, hace un año, produjo un tejido cardíaco humano bioimpreso. También lo hizo con tejidos individuales, incluídas válvulas, ventrículos y vasos sanguíneos. El proceso implicó la reprogramación de los glóbulos blancos de un paciente en las células madres pluripotentes.
Si todo sale como se espera, la compañía planea imprimir un corazón humano de tamaño real en poco tiempo. Lo que significaría que el proceso debe ser perfecto para que el resultado de la impresión funcione con naturalidad. Por lo que si este intento tiene éxito significaría un paso histórico para la medicina y la ciencia porque a partir de entonces ya no se necesitarían donantes de órganos.
