Huawei, mediante un comunicado oficial, informó que ha decidido veder la marca de smartphones Honor y todos los activos relacionados con la misma para “garantizar su supervivencia”.
Honor pasará a manos de Shenzhen Zhixin New Information Technology Co, un consorcio de 30 agentes y distribuidores de la ciudad de Shenzhen, ciudad natal de Honor.
Según explica Huawei, su división de consumo ha estado “bajo una tremenda presión últimamente”, debido a una “falta persistente de elementos técnicos necesarios para nuestro negocio de telefonía móvil”. En clara referencia al veto de los Estados Unidos que ha impedido a Huawei y Honor acceder a determinados componentes para la fabricación de móviles.
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“Cuando la venta se haya completado, Huawei no conservará ninguna acción ni estará involucrada las actividades de gestión empresarial o en la toma de decisiones en la nueva compañía Honor”, ha asegurado la corporación china en un comunicado.
Huawei, por el momento, no ha revelado las cifras de la operación. En el comunicado tampoco ha especificado la ventana temporal que manejan para completar el traspaso de la compañía a Shenzhen Zhixin New Information Technology, los nuevos propietarios.
Con 70 millones de unidades vendidas al año, según los datos de Huawei, Honor se colocaba como una marca emergente, enfocada al público joven, la venta online y terminales con precios económicos.