Google Maps es uno de los servicios de mapas más utilizados en el mundo, y parte de su éxito se debe a las predicciones de tráfico y sugerencias de rutas alternativas. Estas dos funciones requieren grandes cantidades de datos y de la inteligencia artificial (IA) para que los usuarios lleguen a su destino sin problemas.
Por un lado, los datos agregados de localización contribuyen a la estimación de tráfico actual, pero no dicen nada de cómo será el tráfico dentro de 20 o 50 minutos. Es decir, pueden decirle al usuario cómo está la carretera en este momento.
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Pero el servicio de mapas de Google también ofrece predicciones, y para ello, “analiza patrones históricos de tráfico” para las carreteras en el tiempo. Es decir, recopila información sobre las carreteras, los momentos del día y la velocidad a la que circulan los vehículos para que el algoritmo de la compañía pueda establecer patrones y generar predicciones.
Para mejorar la precisión, Google dijo que se asoció recientemente con DeepMind, un laboratorio de investigación de Alphabet AI. La compañía dice haber visto tasas de predicción precisas para más del 97 por ciento de los viajes. Si se predice que es probable que el tráfico se vuelva denso en una dirección, la aplicación automáticamente encontrará una alternativa de menor tráfico.
Ahora que mucha gente está trabajando desde casa y saliendo con menos frecuencia debido a la pandemia de coronavirus, Google dijo que ha actualizado su modelo para priorizar los patrones de tráfico de las últimas dos a cuatro semanas y despriorizar los patrones de cualquier momento anterior